La presencia de los padres con sus hijos a la hora de comer es primordial para que los niños aprendan buenos hábitos alimenticios.
La alimentación saludable se basa en ingerir los alimentos necesarios y suficientes para conseguir los nutrientes fundamentales para que su organismos funciones correctamente.
Una buen habito alimenticio conserva conserva y reparar su organismos y ademas disminuye el riesgo de contraer enfermedades.